Un masculino que circulaba en moto por las calles de San Miguel de Tucumán fue atrapado por vecinos tras haber robado un teléfono celular. El arresto civil, que se produjo el último domingo, pero cuando los efectivos policiales llegaron al lugar descubrieron que el delincuente era policía.
El suceso se produjo en la puerta de un lavadero de autos mientras un hombre esperaba que le entreguen su vehículo. Según portales de aquella provincia, el hombre fue sorprendido por el delincuente que lo encerró con su moto mientras le decía, a punta de pistola: “Dame el celular o te quemo”.
Bajo esas circunstancias, la víctima no opuso resistencia y le entregó su celular. El delincuente huyó rápidamente pero vecinos que observaron el hecho pidieron auxilio y otras personas cerca del lugar comenzaron a rodear al caco que, viéndose acorralado, comenzó a disparar hiriendo a uno de los vecinos. Sin embargo, otros actuaron ráudamente logrando tirarlo de la moto.
El joven, ya tirado en el piso, fue aprehendido por los vecinos, que por otra parte y por una lógica reacción del momneto, lo agredieron a golpes de puño dejándolo ensangrentado.
Lo insólito ocurrió cuando llegaron los efectivos de la comisaría dado que uno de los agentes alertó que el delincuente era un compañero suyo de la fuerza de seguridad. Según se comentó tras conocerse este dato, el poliladron tucumano aprovechaba los francos para salir a robar.
