La cadena mayorista Makro, que desembarcó en Argentina en 1988, decidió vender las 24 sucursales que posee en 10 provincias del país. El grupo Holding, propietario de Makro, ya había cerrado filiales en otros países de latinoamérica hace algunos años. La venta en Argentina, estimada en unos 200 millones de dólares, fue encargada al Banco Santander.
Makro, que comercializa tres marcas propias (Aro, M&K y Ternes); es líder en el mercado mayorista junto a Maxiconsumo, Diarco, Vital y Yaguar y según trascendió algunas de estas empresas habrían participado de una rondas de negociaciones con el fin de expandir sus negocios.
Según publica el portal iprofesional.com, el consumo en caída, es un factor clave en la decisión de la empresa porque las estadísticas contienen una parte de la explicación coyuntural. En junio de 2024, el Índice de ventas totales a precios constantes del INDEC muestra una disminución de 14,5% respecto de igual mes de 2023 para autoservicios mayoristas.
El acumulado enero-junio de 2024 acumula una caída de 12,6% respecto a igual período de 2023. En junio último, el índice de la serie desestacionalizada exhibe una disminución del 0,5% respecto al mes anterior y el índice serie tendencia-ciclo, una variación negativa de 0,7% respecto al mes anterior.
La pérdida de poder adquisitivo que se vienen dando desde hace años, produjo cambios significativos en los hábitos de consumo, los cuales se acentuaron en el último semestre provocado una caída estrepitosa en todos los rubros.
Para colmo de males, nada indica que esta realidad, que se agudiza por los aumentos de tasas, impuestos y servicios, pueda cambiar en el corto plazo. Habrá que ver como impacta esta decisión en las fuentes de trabajo, es decir, si los trabajadores y trabajadoras de la cadena son absorbidos o no, por los compradores