por Fabián Retamar
Las madrugadas en campaña suelen utilizarse, entre otras cosas, para cometer algunas “travesuras”… a veces la militancia se ocupa de “bajar” pasacalles, de manchar cartelería, o de taparla con carteles propios… sin embargo en esta oportunidad la muchachada, que a veces responde a jefes que quieren mostrar su “ingenio”, salieron a pegar carteles de Antonella García, asociándola al dirigente social Juan Grabois.
Es que Antonella García podría representar una amenaza a la calma lograda entre el Concejo y el Ejecutivo… ¿acaso haya olvidado la ciudadanía el fenomenal despelote de 2019 cuando varios concejales andaban megáfono en mano despotricando contra el ejecutivo municipal? ¿Acaso ha quedado en el olvido que en esos días, en una “jugada” poco afortunada y poco duradera, hubo un cambio de presidencia en el Concejo?
A pesar de aquellos episodios, el Intendente seguramente tiene medido, pesado, y visto de lejos y de cerca, a cada uno de los candidatos que pugnan por renovar sus bancas; no así a quienes pueden ingresar; por lo tanto, casi seguramente no tardaría en definir sus preferencias. Si uno trata de pensar en términos de conveniencia lograría entender que si un intendente ya conoce cuanto “cuesta” cada concejal que se dice opositor no querría que alguien nuevo ocupe una banca a riesgo de desconfigurar la calma lograda.
Esta vez, la travesura de los muchachos, vaya uno a saber de qué sector, se ocupó de financiar la impresión y pegatina de unos afiches asociando la cara de Antonella García -la candidata más votada en las PASO- con el líder social Juan Grabois, que es la antítesis de la propuesta de Cambiemos, representada en Baigorria por el concejal antigomeras Javier Minetti.
El sector de García, que encabeza la lista “Siempre Baigorria” hizo un descargo en sus redes sociales aclarando la situación. Pero un párrafo del posteo en la cuenta de Facebook dice textualmente: “Vinimos a romper con la estructura política de años de la ciudad, vinimos a tocar intereses personales de los mismos de siempre, que tienen miedo a perder y se unen para cuidar sus privilegios. Esto les molesta, y parece que mucho”.
De hecho en este contexto, donde la frazada es corta y no hay lugar para todos, a ningún concejal con aspiraciones a renovar su banca le convendría que Antonella García crezca en las preferencias ciudadanas y le saque el puesto… pero de la misma forma cabe hacerse la pregunta ¿Que le convendría más al intendente de la ciudad… que todo quede como está o que ingrese alguien que dice venir a romper estructuras?
Queda por delante un mes y medio hasta las elecciones generales del 14 de noviembre… Si la campaña se recalienta como pinta, este hecho será anecdótico y vaya a saber con que nos encontraremos con el correr de los días… principalmente acercándonos al día de la votación.