por Fabián Retamar
La estrategia de vacunación fue cambiando en casi todo el mundo desde que se fueron aprobando las diferentes vacunas para su utilización. El criterio inicial, que recomendaba vacunar con la segunda dosis a los 30 días de la primera aplicación, cambió debido a que ante la falta de vacunas resultaba preferible vacunar a más personas con la primer dosis estableciendo un lapso de tiempo de 90 días para recibir la segunda.
Sin embargo, ahora se presenta un problema con la vacuna rusa Sputnik V, cuyo componente activo es diferente en la segunda aplicación y la producción en Rusia no alcanza para cumplir con los compromisos asumidos con los diferentes países. El presidente Vladimir Putin reconoció el problema y advirtió que seguiría habiendo demoras ya que se privilegiaría la inoculación de la población local antes de distribuir al resto del mundo.
En nuestro país, dada esta situación, la ministra de Salud Carla Vizzotti, confirmó que se evalúa combinar vacunas de diferentes laboratorios «Es una posibilidad que se evalúa desde el primer momento no solo por la dificultad en el acceso, también para simplificar el proceso de vacunación», dijo la funcionaria.
La semana pasada varios portales de noticias plantearon que la demora en la llegada del componente dos de la Sputnik V hizo que el ministerio de salud y el grupo de expertos que asesoran al Gobierno empezaran a considerar la aplicación de la vacuna Covidencia del laboratorio chino CanSino Biologics en su reemplazo.
Covidecia, es una vacuna de una sola dosis que utiliza como plataforma el mismo vector viral que el segundo componente de la Sputnik V. El Gobierno argentino ya autorizó el uso de emergencia de esta vacuna y acordó 5,4 millones de dosis con el laboratorio chino.
Vizzotti, en diálogo con Radio Metro, dijo que «Si se da el consenso técnico de otros países, y de acuerdo a la experiencia, lo charlaremos con los diferentes distritos y lo estaremos viendo. Los países recomendaron que preferentemente se dé la misma marca (de vacunas), pero lo importante es terminar con los esquemas de vacunación y son varios países de Europa los que están intercambiando plataformas de vacunas».
En Europa, hubo dos problemas con la vacuna de AstraZeneca, primero por la demora en el abastecimiento y segundo por las dudas sobre la seguridad. Por este motivo muchos países reemplazaron la segunda aplicación de AstraZeneca por la de Moderna, tal es el caso de Alemania, donde la canciller Angela Merkel completó su esquema de inmunización de esta forma la semana pasada.