por Fabián Retamar
Desde la década del ´90, el historiador Raúl Zavattero, recorre junto a chicos de las escuelas locales, lugares emblemáticos de la ciudad. Un recorrido de 2 horas y media que se reinició tras la flexibilización de restricciones que imponía la pandemia.
Los chicos, ávidos por recorrer cada uno de los rincones de Granadero Baigorria, hacen un trayecto que va desde el Río Paraná hasta más allá de la autopista y desde Remanso Valerio hasta El Espinillo, para conocer -por ejemplo- la calle Ciudadela, que divide Baigorria de Rosario, o calle Richieri que es el límite con Capitán Bermúdez y el fin del Departamento Rosario.
Cada lugar del trayecto tiene una historia detrás, que Zavattero describe con pasión mientras lo chicos escuchan con gran atención. Las escuelas de la ciudad, el correo, el comando, los bomberos, la ciudad deportiva, la arenera, la estación Esperanza, el Hospital, las fábricas, la capilla de Nuestra Señora de Schoenstatt y son sólo algunos de los puntos de la ciudad que incluye el trayecto.
La propuesta tiene -en su faz pedagógica- una devolución por parte de los chicos que deben realizar un trabajo relacionado a esta interesante propuesta que cuenta con el apoyo municipal, ya que ponen a disposición un colectivo -y a su chofer, Gabriel Sosa- sin el cual sería imposible desplazarse para visitar y recorrer la historia de tantos lugares icónicos de la ciudad.
Una tarea maravillosa realizada de manera desinteresada por un apasionado de la historia como Raúl Zavattero que logra despertar el interés de los más chicos por conocer qué se esconde detrás de cada lugar, de cada edificio, de cada calle de Granadero Baigorria…
(La imagen de la entrada corresponde a alumnos de la escuela 127 Dr. Manuel Alberti)
