Prueban la Técnica del insecto estéril en Mendoza para intentar controlar al Dengue

Prueban la Técnica del insecto estéril en Mendoza para intentar controlar al Dengue

Compartí esta nota

por Fabián Retamar

La técnica del insecto estéril es un método de control de plagas de insectos respetuoso con el medio ambiente que implica la cría en masa y la esterilización, por medio de la radiación, de los insectos causantes de una plaga concreta. Una vez esterilizados, se procede a la suelta zonal sistemática de los machos desde el aire en unas zonas definidas, donde se aparean con hembras silvestres sin que haya descendencia, con lo que se reduce la población causante de la plaga.

Con esta técnica, y ante la inminente llegada de una nueva ola de dengue, el Instituto de Sanidad y Calidad Agropecuaria Mendoza (ISCAMen), liberó 10.000 mosquitos rojos para combatir al insecto que transmite la enfermedad. La experiencia se llevó a cabo en un barrio de Guaymallén y es el primer ensayo del instituto. Este método innovador consiste en someter al insecto a irradiación gamma para lograr esterilizarlo, y así evitar la inseminación de la hembra y por ende su reproducción. Como la mayor parte de las hembras copulan una sola vez en su vida, se produce una reducción de la fertilidad de la población natural, disminuyendo así la cantidad de mosquitos en una zona geográfica determinada.

Pero vale aclarar que la técnica, que también fue estudiada por Estados Unidos, Brasil y México, no se aplica aún de forma masiva y esta liberación de mosquitos rojos por parte del ISCAMen forma parte de una evaluación que, conjuntamente con otros 19 países, se realiza en el marco de un convenio con la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA).

En referencia a la posible aplicación de la técnica en Rosario, Carlos Tasinato, director de Vectores de la Municipalidad de Rosario, fue consultado por Rosario3 y afirmó que “hay que acreditar más experiencias en situaciones similares a nuestro medio como para ser concluyentes” y añadió que “el ejemplo en Mendoza es en una comunidad más acotada y con un grado de concientización mayor”.

De todos modos, el funcionario destacó que es algo “bueno y novedoso” porque permite sumar una herramienta más de control a lo ya existente, pero planteó algunas dudas, como por ejemplo cómo impactaría en una población acostumbrada a pedir fumigaciones en forma reiterada, la decisión de no aplicar ningún tratamiento por determinado tiempo para no dañar a la especie esterilizada, en este caso, a los mosquitos rojos.


Compartí esta nota

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *