por Fabián Retamar
Quizá no la tenga fácil el gobernador electo de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, a partir de su asunción el próximo 10 de diciembre. En principio porque según manifestó el jueves último en una conferencia en el hall de la Legislatura, la deuda que deja la gestión de Perotti duplica los recursos del Estado, y además, porque la determinación del nuevo presidente de la nación de no destinar dinero a obras públicas, pone en jaque la construcción de rutas, algo que resulta fundamental para lograr el desarrollo productivo planteado por Pullaro durante su campaña.
Si bien el gobernador electo también había planteado recortes, esto significa eliminar cargos en secretarias y subsecretarias; e ir a un saneamiento y equilibrio de las cuentas, lo cierto es que afrontar los compromisos en estas circunstancias se hace complicado. Además se debe tener en cuenta el impacto que podrían tener las paritarias por un lado, y la resolución de posibles conflictos en dos ámbitos cruciales como son la educación y la salud pública.
Pullaro ya había declarado tras la reunión con los gobernadores de Juntos por el Cambio del pasado miércoles, que “Santa Fe necesita rutas, somos una provincia productiva, somos una provincia que tiene campo, que tiene industria, que tiene puertos. Indudablemente la desinversión que tuvo por parte del Estado Nacional los últimos años ha perjudicado a nuestra provincia y a la República Argentina. Santa Fe es una provincia que le ha aportado muchísimo a nuestro país en los últimos años, y lamentablemente de eso ha vuelto muy poco, y eso que ha aportado se ha concentrado en el conurbano bonaerense, lamentablemente generando más pobreza para la República Argentina, y generando más pobreza también en el interior, en el interior productivo”
El panorama se presenta complicado y lleno de incertidumbre. El electo presidente de la nación parece determinado a hacer cambios de fondo sin gradualismos, a puro shock, y eso -aún cuando fuera necesario- puede poner en peligro la gobernabilidad en muchas provincias, aún cuando tengan la riqueza que ostenta Santa Fe.
El 10 de diciembre comienza un nuevo capítulo en la historia Argentina. Para muchos se abre una puerta hacia nuevas oportunidades de desarrollo; otros creen que es una vuelta a políticas que ya se implementaron y fracasaron… y casi todos coinciden en que los próximos años van a ser sumamente difíciles.
